El coaching se define como el proceso de acompañar a las personas para, mediante preguntas y reflexiones interactivas, explorar las diferentes opciones que puedan ayudarlas a comprender sus propias dinámicas y encontrar la forma de alcanzar sus objetivos.
Pero, para llevar a cabo este proceso, es fundamental conocer en profundidad los mecanismos propios y, sobre todo, tener una amplia experiencia en múltiples facetas vitales diferentes, lo que permite hacer las preguntas adecuadas en el momento oportuno.
Aunque pueda parecerlo, no es habitual que coincidan en una misma persona todas las facetas necesarias para ser un buen coach. Es en este ámbito concreto donde, mi amplia experiencia personal y mi trabajo de investigación en neurociencia afectiva coinciden para facilitar esos procesos en las personas que recurren a mis servicios de coaching.
Si estás interesado en concertar una sesión de coaching, ponte en contacto directamente conmigo para una primera valoración personal.